Tú.

Llegaste como aire fresco, un cambio necesario en mi vida.

Me tomó por sorpresa, la sorpresa más agradable, más hermosa, más dolorosa cuando el silencio nos invade.

Podría escribir nuestra historia y sin necesidad de exagerar sé que podría conquistar millones de corazones. Así de maravilloso eres.

No sé que nos depare el futuro, si nuestros caminos sigan siendo uno solo o si en algún punto se separen, pero lo que es seguro es que te quedas en mi corazón, con todos los recuerdos, todas las caricias...

Eres el sol al amanecer, un ladrón de sonrisas, besos, lagrimas, me robaste el corazón.

Llegaste en el momento oportuno, sin ser llamado, alguien que necesitaba pero no creía merecer.

Bien sabes que soy tuya, conoces bien mis sueños y ambiciones, sabes como hacerme hablar cuando me rehuso a hacerlo, me conoces tan bien...

Me da terror pensar en que mis días a tu lado se acaben, pensar que no podría darte todo el amor que te puedo dar, es como un crimen, ven, déjame estar a tu lado. Ven, olvidemos que el mundo está observando.

Me tienes segura, mis ojos, mi corazón, cada una de mis palabras son para ti, solo para ti.

Cada uno de mis pensamientos es una forma de adorarte y tú ni cuenta te das.

No sé que nos depare el futuro, si todas las cosas que nos prometimos las llevemos a cabo.

Si cada rincón del mundo que dijimos que visitaríamos lo visitemos juntos. 

Si me permites ver tu sonrisa cada mañana, hacerte berrinches cada noche, si me permites adorarte el tiempo que nos quede en este planeta... Permíteme hacerlo.

Lo único que pido a cambio es que no me rompas el corazón, que seas fiel, seas honesto y que me sigas robando sonrisas como solo tú sabes hacer...

Con todo mi amor,

Paulina.